José Ángel García
Soy químico de formación y tras unos años ejerciendo mi profesión en distintos lugares, conociendo distintas culturas, decidí que era el momento de cambiar mi forma de vida, y para ello tenía claro que quería producir algo que pudiera controlar en su totalidad.
Había trabajado con anterioridad en la industria alimentaria, y por tradición familiar estaba familiarizado con el mundo animal. A partir de ahí, compro cabritas con 3-4 meses en Noviembre de 2017 y empieza nuestro proyecto, que ve la luz en forma de queso con los primeros lotes el 11 de noviembre de 2022.
La idea principal es hacer quesos de la manera tradicional , y el objetivo es hacer quesos diferentes con sabores únicos.
El hecho de elaborar un producto con nuestras manos y, a partir de la leche de nuestros animales, es lo que nos mueve a intentar ser mejores cada día y obtener productos de la mejor calidad posible. Igualmente, es muy gratificante que el cliente valore y se sorprenda en positivo del producto que hacemos.
Mis compromisos son con la tradición y el medio natural que nos rodea. Al final, todo se resume a la propia filosofía de hacer quesos de la forma más natural y tradicional posible; este modo de producir sostenible y con la leche que nos proporcionan nuestros animales conlleva un fuerte compromiso con el cuidado y respeto del medio que nos rodea, el cual somos los más interesados en conservar.
Estamos convencidos de que la única manera de conseguir un producto final apetecible y deseable es respetar tanto nuestro entorno como nuestros animales, siendo consecuentemente el bienestar de nuestro ganado un valor fundamental en nuestro modo de hacer.
Finca Las Hermanas
Nuestra quesería artesanal de granja se encuentra en la Finca Las Hermanas, de propiedad familiar y de larga tradición ganadera.
Estamos ubicados en pleno Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla, en las estribaciones occidentales de Sierra Morena, y lindando con Extremadura y el Parque Natural de la Sierra de Aracena y los Picos de Aroche. Las diferentes altitudes en el área del Parque, desde los 90 a los 1000 m sobre el nivel del mar nos ofrecen una diversidad de paisajes y, por lo tanto, una gran riqueza de hábitats.
El entorno en el que nos situamos nos ha permitido que los recursos energéticos necesario para elaborar nuestros quesos sean de origen renovable, desde las placas fotovoltaicas que nos permiten mantener el frío requerido por nuestros quesos, hasta la energía calorífica que nos proporcionan los árboles y ramas secos de nuestra finca en forma de biomasa permitiendo a su vez la limpieza del campo y la consecuente minimización en la existencia de incendios.
La Sierra Norte, como espacio natural protegido que es y Reserva de la Biosfera, está sometido a un especial cuidado medioambiental, que debe empezar por la concienciación de las propias personas que forman el Parque, que debemos preservar el medio que nos rodea y optimizar sus recursos, tanto hídricos como ganaderos, madereros o cinegéticos, entre otros.
Raza florida
La raza florida es una raza autóctona de contrastada aptitud lechera adaptada a diversos sistemas de explotación. La denominación Florida procede de la capa característica de la raza, que es un moteado rojo sobre fondo blanco ó viceversa, de tal forma que asemeja un campo florido.
Actualmente tengo una familia de 220 cabras de raza florida que disfrutan de una dehesa de encinar en régimen semiextensivo en la que se alimentan de hierba, bellotas y pastos… según la época de año, complementando con una selección de cereales y forrajes que les aportan el equilibrio nutricional necesario. Este pastoreo de los animales favorece al mismo tiempo la limpieza del campo, y por ende, evita la proliferación de incendios forestales, produciendo además un continuo abono para la tierra, por lo que los animales en extensivo son los primeros en la necesaria protección del medio ambiente.
Estamos convencidos que un buen trato a los animales redundará en animales más tranquilos y dóciles, y por tanto, en una producción de mayor calidad. Actualmente se ha acrecentado en nuestra sociedad un sentimiento conciencia sobre la protección, el respeto y la defensa de la naturaleza en general y de los animales en particular, que en este caso recibe el nombre de bienestar animal, y lo podemos definir como un estado de completa salud mental y física, donde el animal está en perfecta armonía con el ambiente que le rodea.
Existe una relación directa entre el bienestar de los animales y la seguridad de los alimentos obtenidos de ellos, ya que un animal que carece de bienestar y que por tanto sufre estrés, es más sensible a padecer enfermedades y alteraciones que podrían manifestarse en los productos derivados del mismo.
Este cuidado de los animales nos permite elaborar todos nuestros quesos con leche cruda, favoreciéndonos de una flora microbiana propia y característica, exenta de fermentos comerciales o sintetizados en laboratorio, consiguiendo por tanto unos quesos únicos.